¡Vamos a divertirnos!

Authors: Krystal Guillory, maestra de estudiantes con discapacidades visuales, Luisiana, y coordinadora estatal de la Academia de Aprendizaje y Alfabetización en Braille (Braille Enrichment Learning and Literacy, BELL) de la NFB de Luisiana

Nota del editor: En la vida de un niño, el juego es la base del aprendizaje. Sin embargo, con demasiada frecuencia, los padres y los educadores se preocupan de que los niños ciegos no juegan de forma constructiva. En este taller, la educadora Krystal Guillory habla del juego en general y comparte ideas para ayudar a los niños ciegos a jugar y aprender.

La autora sentada a una mesa mientras habla por un micrófono.

Soy la coordinadora estatal de nuestra Academia BELL® de NFB de Luisiana. Siempre estamos jugando y siempre estamos aprendiendo. Tenemos un programa de prekínder fenomenal, pero a veces los maestros y los padres nos observan y dicen: “¡Sólo están jugando por ahí!”. Pues sí. Juegan mucho, pero hay mucha estructura. Están jugando y están aprendiendo. Creo que a veces la gente intenta meter prisa a los niños para que tomen papel y lápiz, para que se sienten y hagan las tareas escolares. Pero se pierden tantas cosas cuando un niño no tiene la oportunidad de jugar.

Los beneficios del juego

El juego ayuda a desarrollar la imaginación y la creatividad. En el juego simbólico, el niño deja que un objeto represente a otro. Un palo puede convertirse en un caballo; una caja, en un barco. En el juego no estructurado, los niños dirigen sus propias actividades, libres de los horarios y las expectativas de los adultos.

El juego también ayuda a obtener beneficios conductuales. Todos los presentes en esta sala nos sentimos a veces abrumados. Cada uno de nosotros tiene actividades que nos ayudan a superar esos momentos de estrés. Por ejemplo, a mí me gusta tejer. A veces, cuando las cosas están un poco alocadas, me siento a tejer para calmarme. Algunas personas salen a cantar al karaoke. Algunos cultivamos un huerto. Al igual que los adultos, los niños necesitan formas de calmarse. Su juego puede reducir la ansiedad y el estrés.

Como maestros, sabemos que el juego mejora la alfabetización. Cuando los bebés arrullan y gorjean y usted les devuelve los sonidos, están empezando a aprender el lenguaje. Cuando manipulan objetos, desarrollan una coordinación muscular fina que les ayudará más adelante con la escritura.

El juego solitario es tan importante como aprender a jugar con otros. A veces los padres y los maestros se preocupan porque un niño no interactúa con otros niños. Pueden estar jugando junto a otro niño, que también juega solo. Participan en juegos paralelos, que en realidad son una forma de interacción. El juego solitario independiente también desarrolla habilidades que le ayudarán más adelante a socializar.

El juego ayuda a los niños a aprender a resolver problemas. Con demasiada frecuencia, cuando los niños tienen dificultades, los adultos intervenimos y resolvemos el problema por ellos. Cuando hacemos eso, les quitamos la oportunidad de resolver las cosas por sí mismos.

Una frase que oímos a menudo de los niños es: “¡Me aburro!”. Como padre, no tiene que precipitarse y resolver ese problema por ellos. Tenemos que darles la oportunidad de hacer frente a su aburrimiento siendo creativos.

El juego también favorece la forma física. Puede agudizar los reflejos, mejorar el control de los movimientos, fortalecer el sistema cardiovascular y mejorar el equilibrio.

Los niños ciegos y el juego

Algo que he notado a menudo es que todo el mundo quiere llevarle cosas al niño ciego. Muy a menudo oigo a padres y maestros decir: “Siéntate a la mesa y te traeré tus bloques”. ¡Deje que el niño se mueva! ¡Deje que los niños encuentren sus propios juguetes! No tiene que llevárselo todo. La primera o las dos primeras veces puede ir con ellos y mostrarles dónde están las cosas, pero después deje que las encuentre por sí mismo.

Piense dónde guarda usted las cosas de su hijo. No ponga sus juguetes fuera de su alcance en un estante superior. Guarde sus cosas en lugares donde el niño pueda cogerlas de forma independiente, sin necesidad de su ayuda.

He aquí algunos consejos para fomentar el juego independiente. (¡A veces los padres no están muy contentos con esto!). En primer lugar, guarde todos los juguetes que se iluminan, cantan, pitan y zumban. Los mejores juguetes para el juego independiente son los que suponen un reto para los niños. Piense en recipientes de plástico, materiales de arte, muñecas, pelotas y cestas, vehículos de juguete o animales de juguete. Reunir estos juguetes requiere una especie de mentalidad Montessori. Deje que los niños manipulen los juguetes. No es necesario que los juguetes lo hagan todo por ellos. Tener que interactuar con sus juguetes ayudará a los niños a jugar de forma independiente.

Asegúrese de que los juguetes sean adecuados para la edad y la etapa de su hijo. Elija juguetes que supongan un pequeño reto para los niños, pero evite los que estén demasiado lejos de su nivel y requieran su ayuda.

Me he dado cuenta con las familias con las que trabajo de que muchos niños parecen tener demasiados juguetes. Tener demasiados juguetes puede llegar a ser abrumador. Si tiene muchos juguetes, vaya rotando su uso. Guarde algunos y saque otros de vez en cuando para mantener el tiempo de juego renovado. Incluso puede hacer cestas con juguetes temáticos especiales. Puede que su hijo guarde todos los bloques en una cesta y todos los automóviles y camiones en otra. Todas las muñecas y muebles de muñecas pueden ir en otra.

Cree un espacio de juego seguro para el niño, ¡y le reto a que no haya pantallas allí! No tenga el iPad cerca ni la televisión encendida cuando su hijo esté jugando de forma independiente.

Gestione sus propias expectativas. ¿Cuál cree que es la capacidad de atención de un niño de dos años? La capacidad de atención real de un niño de dos años es de cinco a seis minutos. El niño puede jugar más tiempo, incluso durante treinta minutos más o menos, pero cambiará de marcha, de una actividad a otra. Los niños de tres años pueden permanecer en una actividad entre seis y ocho minutos, y los de cuatro, unos diez. Incluso los adultos solo pueden prestar atención durante veintidós minutos. Después, tenemos que hacer una pausa.

Desarrollar la independencia

El juego independiente es muy importante, pero ¿sabe la mayoría de los niños jugar automáticamente de forma independiente? Al principio, los niños reciben mucha información de forma visual, por lo que, si su hijo es ciego o tiene baja visión, puede que tenga que enseñarle algunas cosas para empezar. A veces también tenemos que enseñar cosas a los niños videntes.

Especialmente cuando sus hijos son muy pequeños, puede que necesite modelar el juego para ellos. Puede tirarse al suelo y jugar un rato con ellos. Puede proporcionarles algunas experiencias que les sirvan de trampolín para jugar más adelante.

Aquí va un ejemplo. Siéntese con su hijo y construyan juntos una torre con bloques. Luego usted dice: “Acabamos de construir una torre juntos. Ahora voy a dejarte que juegues solo”. Entonces se aleja un poco, pero permanece al alcance del oído. Que sea un plazo corto al principio. Cuando dé ese paso, alejándose, no interrumpa constantemente. Es muy tentador echar un vistazo y decir: “¡Oh, mira lo que has hecho! Tienes seis bloques apilados”. Usted intentaría dar ánimos, pero su hijo puede acabar sintiendo que necesita su validación.

Piense en ello en su propia vida. Si está muy concentrado en algo, realmente concentrado, y alguien lo interrumpe, probablemente se sentirá molesto. La interrupción lo distrae. Lo aparta de lo que está haciendo. Dé a su hijo la oportunidad de jugar solo, sin interrupciones. Al hacerlo, usted ayuda a que se construyan vías importantes en su cerebro.

Como trabajo en las escuelas, a menudo veo el resultado final de la interferencia de los adultos. Los estudiantes conocen todo el proceso de una tarea, pero no dejan de preguntarse: “¿Esto está bien?”. Les digo: “Lo estás haciendo bien, ¡sigue adelante! Hablaremos de ello cuando termines”. A veces les doy un objetivo. Por ejemplo, si un niño está ansioso por escribir un ensayo, podría decirle: “Consúltame cuando termines el tercer párrafo”.

Los niños se obsesionan mucho con tener que tener razón y se preocupan por cometer errores. A mis estudiantes de todas las edades intento reiterarles: “Aunque algo no salga bien, vas a aprender de los errores que cometas”.

El juego independiente tiene que convertirse en parte del día de su hijo. No quiero decir que deba ser rígido al respecto: “A las 9:02 de la mañana tendremos tiempo de juego independiente”. Intente encontrar oportunidades para que el juego forme parte de la rutina diaria de su hijo. Descubra qué funciona con la vida de su familia.

Aprender a jugar

Quiero hablar de actividades que pueden ayudar a los niños a aprender a jugar. Algunas cosas funcionan muy bien para algunas personas y no tan bien para otras. Por ejemplo, creo que jugar con arena puede tener muchos beneficios, pero a algunos padres no les gusta. Se puede jugar con arena en un espacio reducido, como un gran tarro o cuenco, o puede hacerlo en un arenero tradicional. Puede utilizar varios tipos de cucharas, o puede utilizar cosas como conchas marinas o coches. Puede cambiar las cosas de vez en cuando.

Otro tipo de juego es el juego con agua. Puede utilizar una mesa de agua o simplemente un cubo normal. Puede utilizar diferentes palas, juguetes que floten y juguetes que se hundan, piedras de diferentes tamaños. ¡Solo chapotear es genial!

La plastilina es muy beneficiosa. Es estupenda para el control de la motricidad fina, la destreza de los dedos y la creatividad. Como maestra de niños ciegos, diré que es realmente fundamental que lleguen a la escuela con fuerza en las manos. Si no vienen con fuerza en las manos, el proceso de aprender a leer y escribir en braille será mucho más lento. Puede que capten la fluidez de la lectura línea por línea, pero no tendrán fuerza para pulsar las teclas de una máquina de escribir en braille.

Compare la experiencia de los niños ciegos en prekínder y kínder con la de los niños videntes. Los niños videntes aprenden a utilizar los lápices. Empiezan garabateando antes de aprender a escribir letras distintas. La mayoría de los niños videntes han coloreado en casa, antes de entrar en la escuela. Ya tienen la experiencia de sostener un lápiz de color y hacer marcas en el papel.

Muchos de nuestros niños ciegos no han tenido la experiencia de colorear. Muchos padres creen que no tiene sentido dar lápices de colores a sus hijos ciegos. ¡Por supuesto que podemos dejar que coloreen! Podemos hacer líneas en relieve en un trozo de papel para que puedan colorear un dibujo o un diseño. Los niños pueden utilizar un tablero de dibujo de líneas elevadas como la Sensational Blackboard. Pueden dibujar sobre él con un lápiz o bolígrafo normal y crear una línea en relieve.

Usted también puede hacer un contorno con Wikki Stix. A algunos niños no les gustan porque dejan una película cerosa en los dedos, pero a otros no les molesta en absoluto. También puede hacer un contorno con pegamento Elmer. Tiene que planificarlo con antelación, porque el pegamento tarda unos dos días en secarse. La forma más rápida de hacer líneas en relieve es utilizando cola caliente. Puede hacer muy rápidamente un contorno sencillo utilizando una pistola de pegamento.

Otra idea es utilizar una pantalla para colorear. Puede sujetar una hoja de papel de lija a una tabla sujetapapeles y colocar encima una hoja de papel. Haga que el niño dibuje o coloree encima del papel de lija, y creará líneas que podrá sentir. Podrá sentir dónde se producen los trazos. Se puede hacer lo mismo con un trozo de mosquitera de ventana.

Los niños ciegos pueden disfrutar pintando con los dedos. Los distintos tipos de pintura para aplicar con los dedos tienen texturas únicas. Algunas de estas pinturas son suaves y otras espesas. También puede añadir cosas a la pintura para crear texturas variadas. Pruebe a utilizar plumas o arena.

Los niños ciegos también pueden desarrollar la fuerza de las manos utilizando plastilina y arcilla. A veces, los niños simplemente palmean la plastilina o la golpean. Anímelos a darle forma con los dedos, lo que desarrolla la fuerza y la coordinación de los dedos. Otras formas de desarrollar la motricidad fina son comer con cubiertos y untar el pan con mantequilla.

Jugar a disfrazarse es una forma divertida de adquirir habilidades para vestirse. No es necesario tener disfraces muy elaborados. Los niños pueden jugar con sombreros y bufandas. También pueden probarse los zapatos de papá o mamá.

Las muñecas, los muñecos G.I. Joe y los animales de peluche pueden fomentar el juego imaginativo. Puede decorar un rollo de papel higiénico y convertirlo en una muñeca. Los niños pueden inventar historias con estos personajes de muñecas.

Música, baile, canto

He tenido varios estudiantes que han estado inactivos la mayor parte de su vida. No se les ha dado la oportunidad de moverse. En esos casos, tenemos que dar marcha atrás e incorporar esas experiencias, independientemente de la edad cronológica del niño. Recuerdo a una madre que me dijo: “Me encantaba columpiarme cuando era niña. No sé si mi hijo podrá columpiarse algún día”. Yo pensé: “¿Qué? ¿De qué está hablando?”.

No tenga miedo de dejar que sus hijos ciegos corran, salten, se columpien y trepen. Puede que al principio tenga que enseñarles cómo hacerlo. Dígales: “¡Sujétense con las dos manos para no caerse!”. Entonces déjeles correr algunos riesgos razonables, como hacen los demás niños.

El juego en la naturaleza ofrece muchas oportunidades. Puede ser tan sencillo como salir a la calle y buscar hojas otoñales. ¡Hay muchas cosas sensoriales al aire libre! Los niños pueden descubrir la textura de la hierba, las hojas, la tierra y la grava. Quizá un día pueda colocar cubitos de hielo en la mesa de agua. ¿Hielo? ¿Qué ocurrió allí?

Luego, cuando se juega en el interior, están los juegos de mesa. Puede realizar sencillos juegos de memoria con texturas. Muchos juegos disponibles en el mercado pueden adaptarse muy fácilmente. Todo el mundo ha utilizado alguna vez una caja de cartón, ¿verdad? Puede meter a un niño pequeño en una caja de cartón y empujarlo por todas partes. Más tarde subirá a la caja por su cuenta. Con una caja, todo es posible. Puede ser un barco, un auto o un escondite secreto.

Los niños videntes suelen estar motivados para gatear porque quieren alcanzar las cosas que ven. Las señales auditivas pueden motivar a los niños ciegos a gatear. Cuando hago intervención temprana con bebés ciegos, a veces enrollo una toalla y la pongo bajo el vientre del niño. Luego puede maniobrar sus manos y sus rodillas para que se muevan. Tenga ante ellos algo que les motive a avanzar. Puede ser un juguete auditivo o puede ser la propia mamá. A menos que el niño tenga algún problema físico, funciona casi siempre.

Si su hijo tiene libros favoritos que usted lea en voz alta, puede hacer cajas de cuentos para utilizarlas junto con la lectura. Por ejemplo, si está leyendo Ricitos de oro y los tres osos, la caja podría incluir una muñeca para representar a Ricitos de oro y tres osos de peluche de diferentes tamaños para mamá, papá y el bebé.

Para una exposición temprana al braille, etiqueta las cosas de la casa. Aunque su hijo aún no sepa leer, puede acostumbrarse a sentir los puntos y saber que significan algo.

Ciego o vidente, su hijo es ante todo un niño. Queremos que nuestros hijos aprendan, y aprenden jugando. Ofrezca a sus hijos muchas experiencias y oportunidades para que puedan aprender sobre el mundo en el que todos vivimos.

American Action Fund for Blind Children and Adults: Future Reflections Convention Issue 2023